viernes, 25 de septiembre de 2015

Dentro de mi luchan fuerte dos pasiones

Dentro de mí luchan fuerte dos corrientes:
Una quiere que le haga holgado hueco,
que trabe amistad con los de siempre
y me arrime a los que triunfan y tienen,
que me monte en la cresta de la ola
y suba con su espuma.
La otra, que sea hueco
– casa, choza, techo, refugio –
lleno de espíritu, brisa y ternura
para los que nada tienen.



Dentro de mi luchan fuerte dos opciones:
Una piensa en aprovecharse,
en sacar partido y beneficio
a todo y todos los que se cruzan en mi camino;
en quedarse, como siempre, en su puesto y centro
recogiendo aplausos y elogios.
La otra, en salir a la periferia
a estar con los que son despojo;
en convidar y compartir
sin esperar recompensa.

Dentro de mi luchan fuerte dos voluntades:
Una opina que es necesario pisar fuerte,
que hay que medrar y alzarse como sea,
que los otros siempre son rivales,
que codazos, zancadillas y empujones
son cosas bien naturales y valen
para labrarse placas e imágenes.
La otra, que hay que anonadarse,
vaciarse y abajarse hasta tocar lo intocable,
porque muchos no pueden levantarse.

Dentro de mi luchan fuerte dos pasiones:
Una busca lucrarse y aprovecharse
entre tráfico de influencias
y privilegiadas informaciones,
favoritismos, enchufes, prebendas;
que todos aporten para mantener llena
cartera, bolsa, cuenta y maleta.
La otra sueña en alegrar y saciar a los nadies
y en vivir feliz aunque te despierten,
te pidan , te quiten y no te paguen.

Dentro de mí luchan fuerte mis quereres.
Y todavía no he organizado ese banquete,
tu banquete,
mi banquete,
nuestro banquete...
gratis.

Florentino Ulibarri