jueves, 8 de octubre de 2015

El don de tu llamada

Me has dado, Señor,
el don de tu llamada que me invita a seguir.
Me has dado, Señor,
tu gracia que me inunda y que me empuja a vivir.
Me has dado, Señor,
hermanos que trabajan y abren su corazón.
Me has dado, Señor,
un ser irrepetible, mi "yo".

Te ofrezco, Señor,
las fuerzas que me has dado
y la ilusión por vivir.
Te ofrezco, Señor,
los triunfos y fracasos,
el gozar y el sufrir.
Te ofrezco, Señor,
el tiempo de esperanza,
fruto de tu bondad.
Aquí estoy, Señor,
dispón y haz lo que quieras de mí.