domingo, 13 de diciembre de 2015

Ayúdame a decir la verdad

Señor,
ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes
y a no decir mentiras
para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me das humildad, no me quites la dignidad.
Ayúdame siempre a ver la otra cara de la moneda,
no me dejes inculpar de traición a los demás
por no pensar igual que yo.
Enséñame a querer a la gente como a mí mismo
y a no juzgarme como a los demás.



No me dejes caer en el orgullo si triunfo,
ni en la desesperación si fracaso.
Más bien recuérdame que el fracaso
es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es un signo de grandeza
y que la venganza es una señal de bajeza.
Si me quitas el éxito,
déjame fuerzas para aprender del fracaso.
Si yo ofendiera a la gente,
dame valor para disculparme
y si la gente me ofende,
dame valor para perdonar.
¡Señor...si yo me olvido de ti, nunca te olvides de mí!
Cuida mis pensamientos...
porque se volverán palabras.
Cuida mis palabras...
porque se volverán actos.
Cuida mis actos...
porque se harán costumbre.
Cuida mis costumbres...
porque forjarán el carácter.
Cuida mi carácter...
porque formará mi destino.

Mahatma Gandhi