Señor, hoy quiero darte gracias por el regalo de la vida.
Gracias porque has trazado mi camino
y me has conducido con amor de Padre;
me has tomado de la mano,
aunque no siempre he percibido tu presencia a mi lado.
Señor, te doy gracias por las personas que han pasado por mi vida,
aquellas que me acompañaron en mis tristezas,
que me animaron cuando todo parecía oscuro a mi derredor,
que me han ayudado a reconocer mis errores y a perdonarme,
que se alegraron con mis éxitos y me ayudaron a ser mejor.
Señor, gracias por las personas que me han amado de verdad.
Te pido perdón, porque no siempre he sido agradecida,
porque....
Gracias porque te has hecho presente en mi alegría,
para animar a muchas personas tristes;
porque te has hecho presente en mi debilidad
para llevar tu fuerza a los que estaban a punto de caerse.
Señor, aunque te lo diga temblando, te ofrezco mi vida entera,
para que Tú sigas bendiciendo a quienes más lo necesitan.
Señor, enséñame a vivir intensamente este año recién estrenado,
que es don tuyo, un regalo maravilloso;
concederme valor de enfrentar cada nuevo reto que se presente,
Ayúdame a seguir creciendo en alegría, fe y entrega.
Sé Tú, Señor, mi refugio, mi fortaleza, mi roca fuerte...
que tu amor esté en mis palabras y acciones;
que con mi vida pueda proclamar ante el mundo:
¡SOY FELIZ PORQUE TÚ ME AMAS!
