sábado, 30 de abril de 2016

Quiero ver, Señor

Señor, una vez más estamos viviendo
una profunda intimidad.
Cada uno de nosotros siente su vida
maravillosamente invadida por tu vida.Estamos viviendo ahora
la aventura de tu vida
en nuestra vida,
tu fuerza en nuestra debilidad,
tu vigor en nuestra impotencia.

Tu luz ha penetrado
en los caminos de mi ser.
Tú eres la luz para mi caminar.
Sé que sólo en tu luz, Señor,
podré construir bellamente mi vida.
Sé que Tú vives en la luz,
y que nos has comunicado
un poco de esa luz.

Pero, lamentablemente, por nuestra parte
todo son tinieblas.
Señor, los hombres parecen
sentirse satisfechos
caminando en las tiieblas.
Parecen sentirse a gusto caminando a ciegas,
con una venda en los ojos.
No quieren ver
Y éste también es mi pecado:
muchas veces , tampoco quiero ver.

Tengo miedo de que, examinando mi vida,
me vea obligado a cambiar.
Yo te suplico, Señor: Abre mis ojos.
En este momento de sinceridad, estoy seguro,
Señor, estoy seguro de que quiero ver.

Deja que tu luz penetre
ahora en mis tinieblas.
Luz. Claridad. Resplandor. Luz que ciega.
Transparente claridad. Destello iluminador.
Yo quiero ver, Señor, quiero ver. Amén.