Virgen de nuestro pueblo, traemos con ilusión esta Copa y, junto a Ti, queremos dar gracias a Dios.
Gracias por esta temporada tan bonita, en la que hemos compartido tantas emociones.
Te damos gracias por esta victoria y te agradecemos, aún más, la posibilidad de entrenar, correr, jugar, sudar, sufrir y disfrutar.
Gracias, porque en cada partido hemos disfrutado como si fuera el ultimo de nuestra vida.
Gracias porque hemos permanecido unidas en los éxitos y en las derrotas.
Gracias porque nos has ayudado a descubrir nuestras capacidades personales y a valorar las capacidades de las demás; a repartir el juego entre todas.
Gracias porque hemos aprendido a ser equipo, a ser granos de una misma espiga, órganos de un mismo cuerpo, músicos de una misma orquesta.Gracias porque hemos podido comprobar que merecen la pena los esfuerzos, los sacrificios y las renuncias cuando queremos hacer realidad nuestros mejores sueños.
Gracias porque el fútbol nos ha ayudado a superar barreras y prejuicios, a ser más amigas, a unir familias y amigos; a convertir el deporte en ocasión para el encuentro y el diálogo, para conocer a muchas personas maravillosas de otros equipos.
Gracias por nuestras familias, que nos han acompañado y animado. Gracias porque han porque han disfrutado y se han sentido muy orgullosos y orgullosas de nosotras.
Gracias por los entrenadores y por los "directivos".
Gracias, Señor, por estar siempre con nosotras, aunque no siempre te hayamos reconocido.
Gracias por ser nuestro mejor defensa frente a la tristeza y a la desesperanza; por ser nuestro mejor entrenador en el esfuerzo diario por conseguir la victoria en el partido de la vida, por ser cada día más felices, por construir un mundo en el que todas las personas podamos vivir con alegría. Amén.
