sábado, 26 de septiembre de 2015

Profeta de las naciones

DIOS NOS HABLA, NOS LLAMA...

Antes de formarte en el vientre te conocí;
antes que salieras del seno te consagré,
te constituí profeta de las naciones.
Yo dije: ¡Ah, Señor, mira
que no sé hablar, pues soy un niño!
Y el señor me respondió:
No digas "soy un niño"
porque irás adonde yo te envíe
y dirás todo lo que yo te ordene.
No les tengas miedo,
pues yo estoy contigo para librarte,
aráculo del Señor.
Entonces el Señor alargó la mano,
tocó mi boca y dijo:
"Mira, pongo mis palabras en tu boca:
en este día te doy autoridad
sobre naciones y reinos,
para arrancar y arrasar,
para destruir y derribar,
para edificar y plantar"

Y NOSOTROS RESPONDEMOS

Señor, nos has llamado de nuevo.
No por ser los mejores, ya lo sabemos.
Nos llamas porque nos quieres.
Te fías de nosotros, te vuelves a fiar,
a pesar de que no lo hicimos todo bien.

Tenemos miedos, porque a veces nos cansamos,
porque nos viene la duda, la tentación
y entonces no encontramos sentido al trabajo.

Tenemos miedos, muchos miedos,
porque mucha gente no nos entiende,
nos critica y llega el desánimo.

Pero escuchamos tu Palabra: "No temas,
yo estoy contigo" y nos llenamos de gozo.

Responder a tu llamada
es lo mejor que podemos hacer.
Será motivo de alegría para nosotros
y de felicidad para muchos.