Hola, Jesús.
Tú conoces mis ilusiones y ganas de hacer algo.
Tú ves mis energías y posibilidades.
Soy una fuerza joven.
A veces tengo ganas de comerme el mundo
Y demostrar que yo también valgo.
Sé que para ti valgo mucho,
Y esto me anima enormemente.
Gracias, porque confías en mí.
Pero tú conoces también mis limitaciones y defectos.
No puedo ni quiero engañarte a Ti, sería ridículo.
Estás viendo mis ganas de lucirme y llamar la atención.
Sabes mucho de mi comodidad, mi egoísmo y mi vagancia.
Conoces mis dificultades para ser dueño de mis energías,
Te das cuenta perfectamente cuando no soy sincero.
Ayúdame.
No dejes que las posibilidades encerradas en mí,
Queden ahogadas por estas debilidades.
No dejes que me venzan mis fallos y mis faltas.
Al contrario, ayúdame a vencer.
Ayúdame a vencerme.
Gracias por tu ayuda.
Confío en Ti, Jesús.