Gracias, Señor, por el gran regalo de la Comunión.
Nos unimos a Ti y Tú te unes a nosotros,
recibimos el amor creador de Dios Padre,
tomamos la fuerza y la luz del Espíritu Santo.
En la comunión también acogemos a los hermanos.
Que el Espíritu Santo despierte nuestras capacidades,
nos una a la comunidad cristiana, a nuestra parroquia,
a todos los que buscan la justicia y la paz,
y nos ayude a compartir con alegría el tesoro de la fe,
fuente de la esperanza y del amor más grandes.