Estás cerca,
estás siempre,
estás esperando
y no me detengo.
"Respetas mi libertad,
caminas junto a mí,
sostienes mi vida
y no me entero.
Me ayudas a conocerme,
me hablas como a un hijo,
me animas a ser yo mismo
y no te hago caso.
Me amas con ternura,
quieres lo mejor para mí,
me ofreces todo lo tuyo
y no te lo agradezco.
Eres fiel,
eres gratuito,
eres lo que necesito
y no te abrazo.
Perdóname, Padre,
y abrázame ya,
como sabes y quieres,
sin esperar permisos.