sábado, 23 de julio de 2022

Echar en cara

Señor Jesús,
cuando nos sentimos poco atendidos por personas queridas,
recordamos los sacrificios realizados por ellas.
A veces incluso les echamos en cara nuestros desvelos.
También recordamos a Dios lo que hemos hecho por Él.
Nos cuesta amar gratuitamente.
 
Cuando nos sintamos así, recuérdanos cuánto nos amas;
susúrranos que Tú no te dejas ganar nunca en generosidad,
haznos ver que nos amas antes de que lo podamos merecer,
recuérdanos que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por Ti y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más –casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones–, y en la edad futura, vida eterna.
Amén.