domingo, 1 de noviembre de 2020

Al pie de la cruz

 Señor Jesús,
aun estando a punto de morir,
te preocupaste de Juan y le regalaste por madre a María,
pensaste en María y le diste como hijo a Juan.

Desde entonces, María nos cuida a todos como madre
y todos nosotros estamos llamados a sostenernos mutuamente,
porque todos somos vulnerables y todos somos importantes.

Gracias por todas las personas que siguen junto a los que sufren,
hasta el final, aunque duela, amando con fidelidad, como las mujeres.

Ayúdame a encontrarte en todos los crucificados
y en quienes que están, acompañando, al pie de la cruz.
Dame un corazón en el que quepa la humanidad entera,
como el de María. Amén.