domingo, 1 de noviembre de 2020

Esto habría que practicar, sin descuidar aquello

Señor Jesús,
Me esfuerzo por ser educado con las personas,
pero paso de largo de quien me necesita de verdad.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Procuro compartir una parte de mi dinero,
pero no pago con justicia ni cumplo mis obligaciones cívicas.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Separo la basura cuidadosamente para reciclarla,
pero no cambio mi estilo de vida consumista y caprichoso.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Trabajo mucho en favor de mi familia,
pero no doy a los míos la atención y el amor que precisan.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Me siento satisfecho cuando cumplo mis buenos propósitos,
pero me importa poco la vida de los que me rodean.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Cada día rezo y hago muchas actividades,
pero pongo poco amor en lo que rezo y hago.
Y tú me dices: Esto habría que practicar, sin descuidar aquello.

Gracias por enseñarme el camino y recorrerlo conmigo.