Jesús, tu fuiste acogido y cuidado en las entrañas de María.
Tú fuiste recibido y amado en los brazos de María y José.
¡Dichosas las personas que protegen a los más pequeños!
Tú eres acogido en los que tienen hambre y sed, en los más pobres.
¡Dichosos los hombres y mujeres que reconocen tu rostro en quienes sufren!
Tú eres acogido por tantas personas que quieren seguir tus huellas.
¡Dichosos los que, como María, escuchan tu Palabra y la cumplen!