miércoles, 26 de julio de 2023

No confundir a las personas con el mal que padecen

 

Señor Jesús, gracias por enseñarnos a poner el centro en la persona,
por enseñarnos que su sufrimiento se puede aliviar;
que su dolor a veces condiciona sus actos y su actitud,
que, ante una persona que nos trata mal, primero hay que quererla como hija tuya y después “increpar” a la causa de su malestar. 
 
Gracias por quienes no confunden a las personas con el mal que padecen,
por quienes aman a los enfermos y luchan contra la enfermedad,
por quienes aman a los pecadores y luchan contra el pecado.
Gracias por las personas que se dedican a sanar a sus semejantes,
con amor, sin discriminar, buscando sólo el bien de sus prójimos.
Que sepa aprender la lección, Señor, y ame como Tú y Contigo. Amén.